Yo, tú, te, tate.

 

Llegamos dos días tarde a la TATE y no pudimos interactuar con las famosas semillas, pero un hombre nos las mostró en un tarro y hereby doy fe de que son totalmente idénticas a una pipa de las de Semana Santa . Lo único que las de la instalación están hechas de porcelana y pintadas a mano por chinos. Había muchísimas:
Pero no fue eso lo que más me gustó de la TATE, sino, barriendo para casa, la sección de Poetry&Dream, sobre todo Louise Bourgeouis, ilustrando sus Autobiographical Series más que esculpiendo y Dzama, que con un par de trazos puede mandar(nos) callar a todo el neofolkie movement wide range Ella:ayer-era-una-moderna-frívola-hoy-soy-un-ciervo-me-gusta-el-otoño-collares-dorados-espejitos-nacarados/ Él:yo-sólo-quiero-ligar-diciéndote-que-tocar-una-guitarra-es-como-tocar-a-una-mujer. Que ya está todo inventado desde hace tiempo, ¿o qué nos creíamos?
Louise Bourgeois

Marcel Dzama

Marcel Dzama.

Marcel Dzama

Marcel Dzama

Louise Bourgeois

Louise Bourgeois
David Shringley
David Shringley

David Shringley



Bueno y Balthus, Braque, Chirico, Pollok, Modigliani, Bruce Davidson y Picasso: 
Picasso, detalle.
Por fin fui con tiempo y con zapatos adecuados (de los que hacen ruido con el eco de las salas), así 7 horas nos estuvimos haciendo top-top por el museo. Ahí es nada. 
Masterpieces aparte, lo que más me gustó fue cuando llegó un hombre con un globo rojo gigante y empezó a gritar /'elesdi:/. Que todos los contemporary, postconceptual artists toman LSD. Possibly maybe.
Así fue como pasé mi catarrazo.
El Sábado me pasó una cosa muy graciosa: me despertó una llamada de un inglés que conocí una noche, al que no había vuelto a ver y que era profesor de cine en una universidad. Me dijo que si quería bajar a desayunar, que estaba al lado de mi casa. No me apetecía mucho, porque el chico no me entusiasmaba demasiado, pero bueno, bajé. Pedimos los cafés y le pregunté por sus clases, que qué tal, que si ya había empezado, que qué tal los alumnos, y me dijo que bien y puso una cara muy rara, como el emoticono :S A continuación me dijo que no era profesor y que sólo había querido impresionarme, pero que si me servía, sí trabajaba en la universidad, en la fotocopiadora. Me dijo que lo sentía y que como forma de pedirme perdón se ofrecía a imprimirme fotos gratis. La que se quedó con cara de emoticono :S fui yo durante los diez minutos que duró el café. Luego me fui a seguir convaleciendo viendo Mad Men compulsivamente (buá! qué 4ª temporada se están marcando) . Me despertaron de mi señora siesta diciéndome que una gran mayoría, dentro de la cual no me incluía, había decidido que esa noche se salía por Picadilly (af, qué poco me gusta), y fuimos a one of these trendy clubs in Central London, en el que aguantamos 15 minutos. Acabé tomando un hot chocolate con Irene (la amiga de mi amiga que ahora es amiga, mi única amiga española, con la que voy a los conciertos, que me cae genial y que tiene esos rizos nítidos que me encantan y que me recuerdan a las representaciones del ADN)  y cuando nos quisimos despedir, me enteré de que en Londres los metros no duran toda la noche y que me había quedado atrapada en Central London hasta las 6.30. 'No Way', me dije, me eché la capa de city comber por encima y me eché a las calles con mi música hasta dar con un resultado, que me quería ir a la cama. Lo encontré en forma de bus. Descubrí que Trafalgar Square es Plaça Catalunya y me acordé de las pocas veces que cogí un bus en Barcelona. Fue durante el verano fatal, cuando subía a casa después de trabajar. Aquellos días cuando no pude llevar lentillas porque tenía una infección en los ojos y veía todo como si fuera un fotograma de Isabel Coixet, o sea, desenfocando todo lo que estaba a más de medio metro. También me acordé de cuando vinieron David_ y Chumba a verme y fingimos un encuentro casual por Plaça Catalunya. Y sobre todo me acordé de cuando de cuando pedaleaba Triangle-Urquinaona-Arc de Triomf. Entonces me acordé de muchas cosas y pensé 'Joder, Paulita'. No sé muy bien qué quise pensar con ese pensamiento, pero eso fue lo que pensé. 
Al día siguiente, ayer, fui al mercadillo de Brick Lane con un amigo y pasamos todo el día flickering, wandering and eating sin parar.
En otro orden de cosas, he generado vínculos de total antipatía con dos de mi pasillo que gritan, dan portazos a deshoras y ponen muy alta canciones como la de 'boom, boom, boom, boom, I want you in my room'. Os lo juro. 
Una es la arrogancia hecha carne. Quiere ser guapa, estar buena, gustar y ser gustada. Pero no. Así que está todo el día con el ceño (y el coño imagino que también) fruncido, siempre con ese rictus de hermanastra de la Cenicienta. Es una borde, una insolente y una maleducada. Es ruda en sus modales, agresiva, violenta, molesta, desagradable y hace fiestas en su habitación. Hace dos noches, la del Sábado, cuando volví de Picadilly fui a decirle que por favor bajara el tono y justo antes de llamar a la puerta ella gritaba 'I just fuckin' want to fuck'. Os lo vuelvo a jurar.
La otra que me cae mal es igual que Lalaura (para los recién llegados, la hippie del siglo veintiuno que se quiso quedar con mis 700€ de fianza en Barcelona, pero que le salió el timo por la culata gracias a mi tenacidad y a cambio del desgaste físico que, junto con otros factores que ahora no vienen al caso, supusieron el verano fatal anteriormente referido). Es igual que Lalaura pero en irlandesa peliroja al uso. Y su novio es igual que Eleste (que era el novio de Lalaura). Y se junta con la hermanastra de la Cenicienta para escuchar música alto y tarde. Su unión no tiene ni pies ni cabeza, porque no pintan nada una cheerleader histérica, en el sentido de ὑστέρα y una posthippie. Pero ya se sabe.
De verdad, a mi allá películas, que escuchen lo que quieran, que follen lo que puedan, que hagan lo que les parezca pero que no me hagan pasar otra noche de estar a las 3am entrando y saliendo de la cama con un monólogo interior de '¿voy o no voy? Igual si no les digo nada se dan por aludidas'. Y luego pasar a pensar que quién coño me mandaría a mi meterme en una residencia a estas alturas y con lo que llevo a mis espaldas, y cuando hablo de mis espaldas muchos sabéis que hablo de compañeros de piso que organizaban afters en casa o de compañeras que metían a novios, perro del novio, pulgas de perro del novio, amigos el novio y demás complementos del nombre en casa. Con esto último he vuelto a Lalaura y al Este. Al verano fatal. Acabaría aquí mi entrada, porque me encantan las composiciones textuales circulares, pero no quiero acabar con algo tan desagradable. Así que de aquí salto a cuando Lalaura descubrió los Chocapic en el WC. Y de aquí y desde aquí pido que el próximo que venga a verme, que no sé si es Biel o Carmen, que me traiga Chocapic y/o Colacao. Que aquí no hay. Sólo hay Nesquick con sabor a plátano. Os lo juro una vez más.

1 comentario:

  1. En menuda grandísima blogger (porque lo de grandísima joven/mujer ya lo tenemos asumido) te estás convirtiendo.

    :)

    ResponderEliminar